Mañana doy una charla dentro de la I Jornada universitaria de Software Libre. Más o menos contaré el uso que se le está dando en la Universidad de Deusto y los proyectos futuros que se pondrán en marcha. Podéis ver aquí la presentación:
Pero sobre todo intentaré poner un tono de auto-crítica a nuestra situación, porque no todo son flores en el campo. El camino para «liberar» a la Universidad es largo y difícil, pero como bien me decía un profesor: «disfruta de él al máximo«. Los problemas a los que nos enfrentamos son varios:
- A pesar de lo que pueda parecer, la Universidad de Deusto es bastante pequeña. O por lo menos en lo que respecta a los componentes del Servicio Informático. Por tanto, es normal que encuentres a una chica de sistemas mirando cosas de web social, etc… Es decir, tocamos todos los palos sin tener una dedicacion exclusiva a un campo. Esto hace que seamos grandes consumidores de software libre pero que contribuyamos menos de lo que nos gustaría con desarrollos.
- Otro error, al menos en mi opinión, es obcecarse con el software libre. A mí me gusta pensar que soy poco talibana en ese aspecto. Y es que si toca montar un servicio, lo óptimo es analizar las plataformas que te lo ofrecen y luego valorar el que mejor se ajuste. Si el que se amolda mejor es software privativo, habrá que tirar por ese camino. Si los dos bandos son parejos, no hay duda: al libre de cabeza.
- Casi siempre, cuando estamos debatiendo el mundo libre, nos centramos en las herramientas. Pero el principal escoyo son los usuarios. Sin ellos, las herramientas no valen de nada. Es por esto que hay que poner un especial cuidado a la hora de hacer las migraciones. A casi nadie le gustan los cambios, y si no tenemos tacto en el tema, podemos vernos cara a cara con un auténtico motín. Y es que ya lo dijo Benjamin Franklin:
La oxidación por falta de uso gasta mucho más las herramientas que el propio trabajo
La táctica que intentamos seguir nosotros es identificar dentro de cada departamento a los usuarios hackers. Es decir, a aquellos que son menos tecnófobos. A esos se les mima y enseña con esmero las bondades de las nuevas aplicaciones. Tras esto, nos sentamos a esperar el efecto contagio. Serán como virus infectando a sus compañeros, porque nadie mejor que ellos conocen la realidad del día a día que les rodea.
Dentro de las Universidades tenemos una responsabilidad altísima. Y es que, aunque suene un poco pretencioso, nosotros somos, en parte, los que determinamos la tecnología de las futuras empresas. La razón es bien simple: si todos los alumnos universitarios salen aprendiendo a usar sólo Microsoft Office, cuando copen los puestos de trabajo, no quedará más remedio que pagar licencias para que puedan funcionar.
Si alguien se pasa mañana por Donosti, que avise. Para seguir las jornadas en directo, hay un canal de streaming.
Buena presentación, Lorena, vas a dejar a la UD en buen sitio. Nos lo merecemos, ¿no?
Un comentario sobre lo de obcecarse con el software libre en algunos aspectos que para mi son esenciales:
Una universidad tiene que proteger sus áreas competenciales estratégicas. Personalmente, creo que en nuestro caso hay dos áreas que lo son:
* Publicación Web
* Biblioteca digital
El peligro de adquirir sofware privativo para la gestión de estas áreas es que la universidad queda cautiva del proveedor.
El resultado es en mi opinión muy nocivo, porque imposibilita, o al menos limita notablemente, la posibilidad de investigar, desarrollar e innovar en los servicios que se están dando con las herramientas privativas en esas áreas. Es una pérdida de oportunidad total y una falta de visión estratégica lamentable.
Hola Joseba,
Que el software privativo tiene sus inconvenientes y nos encadena a las empresas creadoras, es más que obvio. Sin embargo, si yo necesito una aplicación para hacer calcetines, y la única que se ajusta a mis necesidades es privativa, será esa la que seleccione. Sería un error elegir una aplicación libre que haga pantuflas, porque no estará cumpliendo con mis necesidades.
De todas formas, me estoy refiriendo a aplicaciones genéricas, no a las hechas a medida. Porque, en mi opinión, si la Universidad solicitase un desarrollo propio, una de las condiciones a pedir debería ser que se le entregase el código fuente.
Hola Loreta!
¿¿ Qué se cuece en la Universidad de Deusto respecto a la «Huelga Informática» ¿?
Saludos y enhorabuena por la migración, va mucho mejor!!
@Ioannes Xabier: pues si te soy sincera, estoy sorprendida por el alarmismo que se ha adueñado de los informáticos. Me quedo anonadada viendo cómo nos tragamos lo primero que nos echan a la cara.
Que las cosas no están bien es más que obvio, pero tampoco creo que todo sea tan negro como lo pintan (me parece que hay muchos intereses por ahí pululando…). El decano de la facultad de ingeniería, Jose Luis del Val, ha remitido un mensaje a los alumnos aclarando un poco el tema. Así que desde mi posición, por ahora calma y nada de huelgas hasta que no me entere bien de lo que se está cociendo.
Loreta, estoy de acuerdo contigo, se ha montado un batiburrillo con todo, a pesar de que muchas de las revindicaciones son justas. Una cosa si me ha quedado clara, la inoperancia de los sindicatos. Los Colegios no tienen facultad de declarar huelgas.
@Ioannes Xabier: totalmente de acuerdo