Último capítulo ya de esta bitácora de viaje:
Londres tiene numerosas zonas verdes, algunas de ellas de gran tamaño como Hyde Park o Regent’s Park, que pertenecen en su mayoría a la Corona Británica. Una forma ideal de escapar del bullicio del centro y, si hace buen tiempo, tumbarse a tomar un poco el sol o hacer un buen picnic.
Hyde Park es el más grande y conocido. Sus esquinas son también célebres. Por ejemplo, tenemos el Speakers’ Corner, donde los oradores se ponen a disertar. Justo al lado está el Marble Arch, lo que iba a ser la puerta del Palacio de Buckingham, pero fue trasladado aquí porque los carruajes no cogían por él. Actualmente tiene escondida una comisaría en su interior. El domingo es el día clave para visitar el lago Serpentine, el Memorial de Diana de Gales, el Memorial del Holocausto y ver a los londinenses practicando deporte o tomando sol en las hamacas que se colocan. Justo al lado tenemos los Kensington Gardens.
Sin duda, el parque que más me gustó fue Regent’s Park. Es como un oasis en medio del asfalto. Un lugar por el que pasear y no encontrarte por algunos tramos con ni un alma (algo que se agradece si has tenido que cruzar Oxford Street, por ejemplo). Además, tiene una zona que parece casi una jungla, con pequeños puentes, mini-cataratas,… además del Zoo de Londres. Si seguimos subiendo hacia el norte, tenemos Primrose Hill, una pequeña colina desde la que se tienen unas vistas envidiables de la ciudad. Es una zona tan relajada que hasta famosos como Chris Martin y Gwyneth Paltrow viven por allí. Los domingos es muy común ver a los londinenses con una cestita de mimbre, una botella de champán y unas copitas de cristal, organizar un buen picnic mientras ven como atardece. Alrededor del parque tenemos el Regent’s Canal, un canal que cruza casi toda la ciudad (de hecho, lo veréis también en Camden), que antiguamente su usaba para mover mercancías con barcos arrastrados por caballos. Ahora, los únicos barcos que quedan son mini-viviendas y podremos encontrar hasta un restaurante chino flotante. No muy lejos de este parque también está la famosa Baker Street que tanto describió sir Arthur Conan Doyle y, si sois muy fans de Sherlock Holmes, aquí encontraréis su museo.
Como ya comentaba en mi paseo por The Mall, a su lado tenemos dos zonas verdes: St James’s Park y Green Park. Desde su tranquilo lago tendremos una perspectiva interesante del Palacio de Buckingham. También se estila aquí la colocación de hamacas para que la gente tome el escaso sol que hace.
Highgate cuenta con un parque, pero lo más atractivo, por raro que resulte, es su cementerio. Este campo santo victoriano tiene un halo misterioso y romántico. Y además es lugar de peregrinación de muchos porque allí se encuentran los restos del pensador comunista Karl Marx, el filósofo Herbert Spencer, el novelista George Eliot o el científico Michael Faraday.
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