Lo primero de todo: este post lo escribe Lorena Fernández dando su opinión. Aquí no represento a nadie más que a mi propia persona (y me ha hago, por tanto, responsable de lo escrito a título personal).
Un incidente hoy me ha dejado tocada. No hablaré del mismo, porque de sobra es conocido y no quiero servir como altavoz. La persona que no sepa a qué me refiero, que pare aquí la lectura, porque no se enterará de más.
Este incidente hará que reflexione mucho sobre lo que está pasando en nuestra sociedad. Y no caeré en la trampa de «satanizar» las nuevas tecnologías, porque he descubierto que somos igual de morbosos cara a cara que en Internet. La diferencia es que, como siempre he dicho, Internet da superpoderes que potencian cosas. Y lo que he visto en esta ocasión ha sido potenciar la parte más mezquina del ser humano.
Decepción por las personas
Me ha decepcionado lo rápido que corren bulos, informaciones falsas e incluso algunas muy alejadas de la realidad. No se contrasta nada. No tenemos espíritu crítico ni somos conscientes del daño que podemos provocar con nuestras palabras (bien sea en 140 caracteres o con un chismorreo en los pasillos). Nos hemos vuelto opinadores de todo sin pensar ni medio segundo las cosas ni el efecto mariposa. Por no hablar de lo fácil que banalizamos cuestiones que pueden hundir a personas. La empatía cada día es un bien más escaso.
Decepción por los medios de comunicación
Lo de los medios de comunicación ya ha sido la traca final. Buscadores del amarillismo que enfocan las noticias desde el prisma que les interesa y sin contrastar. No quiero generalizar porque hay buenos profesionales. Pero he visto cosas muy duras estando en el «meollo» de la cuestión.
Pero frente al fatalismo que he pintado en este post solo nos queda una cosa: ponernos a trabajar para cambiar esto. Y mucha mucha reflexión… (he escrito a propósito dos veces mucha). Que esto no se quede en un hecho aislado y tratado superficialmente.
Lo siento… tenía que desahogarme en este rincón.
Ánimo, Lorena. Me apunto a la solución que propones: reflexión y trabajo.
Me quedo con los detalles periodísticos del día de hoy. Lo hemos vivido en nuestras propias carnes. Pero solo hará que nos esforcemos más. Educación, valores y sentido común. Descansa.
Completamente de acuerdo, Lorena. Lamentable que esta banalización de la sociedad dé tanto eco a estas cosas. En los medios porque poco profesionales son amarilleando. Y en todos nosotros, porque poca responsabilidad y solidaridad demostramos haciéndonos eco de algo que decimos «condenar».
Pero quiero quedarme con la parte positiva. Gracias a esto, muchos adolescentes, jóvenes, y no tan jóvenes, a partir de mañana, pensarán dos veces antes, e intentarán tener un poco más de sentido común con toda la información sensible que hoy manejamos de una forma, a menudo, tan imprudente.
El morbo es inevitable. Me repugna pero hasta una próxima «evolución» parece que el ser humano es así. Me repugna y me preocupa mucho más el impermisible ataque de género con el que se trata tan distinto a las chicas y a los chicos.
¡Animo Lorena! No es para tanto. Es la espuma que hoy caracteriza a lo «noticiable». Pasado mañana nadie se acordará de ello… sociedad de consumo rápido, de poca profundidad, demasiada información pero poco contenido.
Entiendo que estés dolida y que además sea por varias razones y no sólo una de peso: por proximidad, por el medio donde se ha dado, Inet, por la forma de expansión… Lo entiendo pero hay que ser realistas, y este invento de la conectividad tiene detrás personas, seres humanos que responden a impulsos, que están educados en la curiosidad que deriva con demasiada facilidad en el cotilleo. Como ya te he escrito en Twitter, si triunfan redes basadas en hacer proselitismo de la vida propia y hacer espeleología en las vidas ajenas, no es de extrañar que sucesos como los acaecidos hoy mismo muy cerca de donde trabajas, sean la pimienta de todas las salsas. Si llega a ser en la UPV-EHU la cosa hubiera sido quizá más pasajera pero el morbo de haber pillado de alguna forma a chicas bien (ya sabes la vitola que tiene la uni privada), ha servido de acelerante. Así como una movilización por una causa injusta puede magnificarse y hasta corregirse con estos altavoces que nos dan las teclas, lo mismo ocurre en sentido contrario y no se trata de justificar ninguna actitud como las que dibujas arriba, las lesivas y sin conciencia.
Los medios de comunicación han ayudado poco, es cierto, pero yo hasta que no he leído en ellos que había un comunicado oficial no me he creído que existieran las fotos y los vídeos, y hasta he estado bromeando sobre lo bien que estaba diseñado el bulo para atraer matrícula (ya sabes el paquete que les tengo a los jesuitas). Te diré más, al mediodía Bori y yo especulábamos con la posibilidad de que fuera cosa de mimesacojea que es el que nos ha levantado la liebre, un guión en toda regla del malévolo bilbaino.
Como le escribía a Javier Vizcaino, yo estuve matando a Fraga semanas antes de que muriera, la otra noche nos reíamos de la muerte del rey, hemos hecho escarnio con Amaia Montero, Bisbal, Belen Esteban y yo concretamente con todos los políticos que se ponen a tiro. Ahora podemos inventarnos una noticia, alimentarla, darle pábulo y convertirla en creíble entre media docena de personas bien organizadas, así que miles mal organizados organizan un «teléfono descacharrado» con más facilidad. Tómatelo con calma, Lorena, todo pasará y se olvidará porque esto va muy rápido. Un beso.
Muchos animos compañera! Hechos como este muestran que tenemos mucho en que trabajar…y reflexionar!!
Gracias por tus palabras. Espero de verdad que reflexionemos. Internet nos aporta mucho, demasiado para saber gestionarlo adecuadamente. Lo triste y vergonzoso es que gente sin escrúpulos use las tecnologías para destruir los derechos y libertades de las personas. Y de paso, que quienes pretenden regular Internet tengan más argumentos para evidenciar esa regulación poco/nada democrática, ni colaborativa, ni distribuida.
Creo que la reflexión y el ejercicio de nuestros derechos y deberes en Internet debería formar parte de las enseñanzas de la vida.
Un abrazo enorme y ¡ánimo! Lo que Internet nos ha aportado a lo largo de su historia es mucho más positivo que lo que unas personas sin decencia, ni valores, ni principios pueden hacer con la tecnología.
Os responderé a todos/as en cuanto mi cabeza me permita procesar esto con la distancia que se merece. Pero sí quería compartir esta reflexión que me parece muy acertada de Juan Carlos Etxeberria.
Ya sé que es fácil decirlo, pero descansa con la conciencia tranquila de quien trabaja a nivel técnico, social y personal para que estas cosas no sucedan. Es cierto que nos queda mucho que comunicar, concienciar, educar… Ten claro que involucrarse en ello merece la pena y, aunque algunos de estos sopapos nos tuerzan el día, el seguir peleando ya es un triunfo.
Gabon
Ay, dónde queda la competencia digital!!! Animo compañera 😉
Animo, Lorena. Confiemos en que de estas cosas la gente que ha actuado de forma poco correcta saque conclusiones y aprenda para que en el futuro no vuelvan a repetirse estas situaciones. En ese sentido tu puedes estar tranquila, porque no tienes nada que aprender y en cambio si mucho que enseñar a los que no saben. Y creo que con tu actitud en las redes sociales lo haces permanentemente, así que no te fustigues. Eres de los buenos 🙂
Ya te mandé un mensajín ayer en Twitter… pero te reitero mi animo y mi apoyo para luchar contra los molinos.
Pues yo quisiera resaltar la cara positiva que también se esconde en el otro lado de estas acciones como es la pequeña red de solidaridad y de ánimo quizás más callada, más dispersa, más silenciosa en muchas ocasiones, pero probablemente más humana.
Si nosotros ponemos también el foco donde lo pone la parte que no nos gusta probablemente nos estemos equivocando en el punto de vista y además dando cuartelillo a aquello que criticamos.
Abrazos
Hola joven:
Ya hace muchas lunas que las nieves del tiempo platearon mis sienes y en esto de las redes sociales no soy más que un emigrante digital… pero…
Hace ahora casi 10 años lideramos un proyecto que perseguía el acercamiento de la tecnología a las micropymes de Bizkaia. Aquel acercamiento se basaba en dos pilares fundamentales: la consultoría y la formación. Y dentro de este último, impartíamos, con mucha frecuencia, un módulo de e-urbanidad o «cómo comportarse en el ciberdespacio». El presupuesto terminó y la era de los proyectos a la sombra de la UE también pero puede que hubiera que reflotarlo dadas las circunstancias.
Ahora, carambolas de la vida, dedico parte de mi tiempo ha hacer lo mismo pero con las manidas 2.0 de fondo. El proceso casi siempre empieza con una discusión sobre las redes sociales. El intercambio «dialéctico» comienza, por parte de mi interlocutor, con un:
– » Eso de las redes sociales no es para mí, no sirve para nada… no me interesan!!»
Y termina con una pregunta por mi parte:
– » Vale, pero… tienes hijos?»
:**
A mí hay algo que me hace recuperar la fe en el género humano en todo este asunto: la capacidad de gestión/comunicación de la Universidad de Deusto (de la que supongo gran parte de la responsabilidad a cierta persona a la que aprovecho para felicitar y agradecer), y la «desalineación» de algún periodista (mencionado en los comentarios anteriormente) cuyo medio se ha dejado llevar como si no hubiera un mañana. No está todo perdido…
Mucho ánimo Lorena, estas cosas ponen a cada uno en su color. Sin darle cancha al tema, yo también me he encontrado con algún artículo que explicaba el incidente de una forma bastante poco profesional. Me quedo con lo que dice Txetxu, esa red más humana y sostenible de quienes, granito a granito van creando una huella coherente, piensan antes de piar y no dan eco a tonterías. Un abrazo,
Aunque gruño bastante… mucho ánimo Lorena!! La sonrisa y el buen hacer son una buena respuesta, además de las que ya tienes en mente 🙂
Pongo aquí el mismo comentario que hice sobre el tema en Cybereuskadi/Gananzia:
«Por lo que he podido saber da la impresión de que se trata de una gamberrada que de modo intencionado o no ha puesto en marcha un mecanismo psicológico muy conocido en situaciones de este tipo: la gente, por afán de protagonismo o sentimiento de culpabilidad, se siente identificada por unas alusiones difundidas al azar y totalmente ficticias. Al margen de que ninguna de las alumnas se reconoce en esas fotos -y dicho sea de paso, fijáos en lo poco inteligente que resulta hacer cualquier declaración en este sentido: con ello las muy estúpidas están reconociendo que, efectivamente, acostumbran a hacer el bobo con las cámaras de los móviles-, hay nombres de mujeres que ni siquiera están matriculadas en los cursos o incluso que ni siquiera existen. En resumidas cuentas: las fotos proceden de cualquier sitio y son de cualquier chica.
Consta que al menos un individuo varón se ha reconocido en las fotos, pero en esto podría haber influido el condicionante psicosocial del que hablábamos al principio. Entre tantos millones de universitarios en todo el mundo sería raro encontrar a alguien que no se parezca a tí. Una vez más tan solo poner de manifiesto la falta de inteligencia de los alumnos de Deusto, pues ese caballero acaba de admitir de un modo que no deja lugar a dudas que él también se monta en la ducha del Colegio Mayor sus propias películas al estilo de Fassbinder.
En cuanto al aspecto técnico, y sin conocer los detalles -pero sí con cierta autoridad para hablar sobre ello, puesto que este verano intervine en las Jornadas de Software Libre de la Universidad de Deusto como docente de un cursillo sobre seguridad de redes inalámbricas-, tan solo decir que la red protegida del centro, provista de encriptación WPA, contraseñas y autenticación mediante servidores de acceso, es mucho más difícil de crackear de lo que sugieren los rumores acerca de lo ocurrido. Recuerdo que en aquel cursillo mis alumnos tomaron muchas notas acerca del ejercicio práctico para romper el cifrado WEP, pero dudo mucho que alguno de ellos esté detrás de este asunto. 🙂
Con respecto a la parte pública de la red la situación es muy distinta. En teoría resulta perfectamente posible extraer archivos (fotos, videos, documentos) de un portátil con recursos compartidos conectado a dicha red. Y en cuanto al tráfico en redes sociales (Facebook), aunque la autenticación se hace de modo seguro a través de SSL/TSL, todo lo que sigue después va 100% en claro, y puede interceptarse mediante un software de monitorización como Wireshark. Otra cosa es demostrar que esto efectivamente se ha hecho y las fotos de las alumnas (que yo ni siquiera creo que existan) fueron sustraidas de esa manera.
A la vista de lo sucedido mi opinión es que se trata simplemente de una paranoia causada por la irreflexividad de unos cuantos incautos y de la enorme repercusión mediática de la misma como consecuencia de la propensión al morbo y el mal gusto de los internautas.
No obstante el hecho puede traer consecuencias por dos motivos: en primer lugar porque marca una divisoria en la evolución de la confianza pública hacia la bondad intrínseca de las redes sociales. Si al final la web 2.0 resulta ser algo tan penoso, endeble y de baja calidad informativa como los medios tradicionales, entonces apaga y vámonos. Asimismo lo sucedido pone de manifiesto un déficit muy importante de la educación moderna: inversiones millonarias en instalaciones, equipos y medios audiovisuales, becas generosas (cada vez menos por culpa de los recortes), profesorado de altísimo nivel y un smartphone en el bolso de cada alumna y en la mariconera de cada alumno.
Pero con todo ello no somos capaces de hacer que la estudiantina se porte con inteligencia y con sentido comun y sea capaz de reflexionar antes de ir a la policía porque en una foto anónimamente distribuida en Internet ha visto a un gevo que se le parece. Esto es sencillamente patético, ¿no os parece?»
Te envío un abrazo, querida. Y te felicito por tu cabeza fría y por ser tan mesurada y comedida. Yo habría destilado venenito puro. Un beso, ¡muac!
Hola Lorrena:
En primer lugar un abrazo y mi enhorabuena por la manera de gestionar esta crisis en redes sociales.
Después decirte que, me consta, este tema está generando debates internos y externos, en las apreciaciones y hasta matices en los propios medios y en la profesión periodística. Desde lo más multitudinario hasta llegar al detalle del title Google y lo apropiado o no de alguna palabra, si se ha buscado el morbo, la audiencia o el rigor, el contraste …
Tan sólo espero que todo esto nos ayude a mejorar, individualmente y como colectivo y que algún día puedas compartir esta experiencia con la profesión porque, como te decía, la gestión me ha parecido excepcional.
Lorena, mucho ánimo.
Un gran abrazo.
Lore, sois (y permíteme que meta a Txipi en el saco) dos de las personas más serias, responsables y de ideas claras que conozco, tanto a nivel personal como profesional. Me parece increíble que todo esto haya estallado entre las manos de dos de las personas más capaces que he conocido.
Aunque por otro lado, y es triste decirlo, ya era hora de que algo así ocurriese. La generación choni, despreocupada y poco educada digitalmente ha llegado a la univerisdad. Una lástima.
Sabes que cuentas/contáis conmigo para lo que necesites. Y animo.
Lorena, mucho ánimo!!
Y compartir contigo el comentario que haces de los medios de comunicación. De un tiempo a esta parte, conozco un poco más el modo de hacer periodismo de algunos «periodistas». Ensucian el trabajo de otra gente que sí es profesional y se lo curra con cada noticia.
Con esto sólo nos queda aguantar el chaparrón y reeducar. Le oí a Daniel Innerarity que el peligro de esta sociedad de la información es que la gente consume información pero la digiere, no la reflexiona, no la hace suya desde un punto crítico.
Ainssss…. que no nos queda nada para conseguirlo…. 🙁
Ánimo Lorena. Estas bobadas tienen la importancia que les des y el daño real que puedan causar. Pasa de lo primero y céntrate en minimizar los segundos. No hay más. Besos y a por ellos.
Lorena,
Ánimo!!!
Creo que el tiempo va a colocar a cada uno en su sitio.
Se nos llena la boca diciendo que hay que apostar por el I+D+i, como garante de un futuro de calidad etc etc…y aquí tenemos a uno de los pilares del sistema universitario vasco siendo linchado. ¿Cuántas noticias se habrán publicado en relación a la investigación de Deusto en los últimos meses? Nada comparable con la presencia que desgracidamente ha tenido en las últimas 48 horas en los medios de toda España. Y esto dice mucho de un país.
¿Y de las victimas reales de todo esto quién se acuerda?
Te dejo mi comentario en relación a «Bogando por la Red» (Los tres problema (sic) que tiene la Universidad de Deusto):
«El problema no reside en tener o dejar de tener una estrategia o identidad digital. Si vamos a criticar empecemos por los propios medios de comunicación digital que han hecho de un “rumor” una noticia, sin contrastarla con nadie…si yo entro en EITB, en el DEIA o en El Mundo y veo titulares alarmistas como los que han aparecido en las últimas 24 horas estaría tan confundido como lo puede estar una persona que ha de emitir un comunicado. Responsabilidades a los medios de comunicación públicos del país que han propagado todo tipo de noticias, y a las personas que han iniciado los rumores, y de modo muy especial a las personas que han robado esas fotos de carácter íntimo y privativo, lo que supone un delito. ¿Y no es delito propagar esas imágenes, pixeladas o no, por los medios de comunicación? Y si las personas afectadas tienen algo en común es que son victimas: tanto por su invasión de privacidad como por su linchamiento en las redes. Qué sean de Deusto o de Bilbao o de Bizkaia creo que poco tiene que ver con el hecho de que son victimas».
Hasta pronto
Estoy contigo, Lorena.
De principio a fin.
De las Ondas a la Red, siempre sentido común
y responsabilidad individual y colectiva.
Animo.
Nos creemos las mentiras, y parece que además nos gusta creérnoslas. Y además las difundimos como si fuera una verdad absoluta.
Y decepciona, pero lamentablemente es difícil cambiar algunos aspectos del género humano.
Como apuntan más arriba, hay que buscarle un lado positivo y es que seguro que alguien se habrá empezado a preocupar más desde hoy de la seguridad de sus datos personales y su intimidad.
Mi intervención en Onda Vasca e Izaronews acerca del tema:
http://www.izaronews.info/euskadi/2012/opinion/14129
Como dice Eguiluz, lo bueno que puede salir de todo esto es que a partir de ahora, es posible que la gente sea un poco más consciente a la hora de manejar información sensible (la propia y, con un poco más de suerte, la ajena).
Un abrazo!
100 % de acuerdo contigo y 100 % preocupado. aquí tienes a otra persona dispuesta a buscar soluciones.
Animo Lorena.
Si esto ha servido para concienciar a la gente… ni tan mal 😉
Ah! y recuerda que mañana volverá a salir el Sol.
Un abrazo
Como bien decíais muchos y muchas, tras la tormenta, vuelve a salir el sol y llega la calma. En una reflexión con más calma, dejo los siguientes puntos:
1) Me ha preocupado enormemente que en todo esto nos hayamos centrado finalmente en la seguridad. En poner de relevancia que todos tenemos que guardar mejor nuestras cosas en vez de recalcar que lo que está mal es robar datos y aún más, reenviar cosas de móvil en móvil banalizando ese hecho. Muchos me decían que este acto no tenía importancia: mentira. Ese hecho hace tanto daño como el robo. Por tanto, habrá que trabajar la e-civismo.
2) El siguiente punto a trabajar es el contraste crítico de la información. No podemos hacer de voceros de algo que no sabemos si es cierto. Hay que contrastar (y aún no me refiero a los medios de comunicación). Todos hemos colaborado a que el bulo creciera y se expandiera como el gas.
3) Punto y aparte para los medios de comunicación. De nuevo, me muerdo los labios (o mejor dicho, paro mis dedos) para no poner improperios. Es fácil que se hagan ecos de barbaridades, pero luego, las rectificaciones, si llegan, no aparecen en portada. Por supuesto, hay excepciones que dan credibilidad a periodistas y medios, pero yo he salido con una sensación de desconfianza enorme.
Por cierto, muchísimas gracias por los ánimos. Es la lectura más positiva que he sacado de estos días cansados pero en los que he aprendido mucho.
Completamente de acuerdo con los puntos 1 y 2. En cuanto al 3, no puedo opinar porque no sé exactamente qué ha pasado en este caso, pero un poquito más de profesionalidad no es mucho pedir. Más besos.
Lorena, en mi opinión, como profesional, lo has bordado. Este caso y uno reciente gestionado por Lontzo serán ejemplos páralos responsables de la gestión de crisis 2.0.
Gracias a ambos por enseñarnos cómo hacer las cosas correctamente.
En lo personal, sabemos que se pasa tremendamente mal, que te has mordido la lengua y que se podría haber dejado llevar uno mismo, pero has hecho lo correcto.
Tienes muchas personas que te estiman y que seguiremos estando a tu disposición para lo que necesites, aunque sólo sea un apoyo o caricia virtual.
Mi calificación: Bikaina.
No sé cual ha sido la noticia y es cierto que no me he enterado de nada por los comentaios vertidos aquí, pero sí es verdad que la gente es cobarde por naturaleza y «escupe» sapos y culebras de los demás a veces sólo porque se aburren. Si no son capaces de socializar cara a cara, es porque les da pánico que la gente les vea como son y antes de que les discriminen, lo hacen ellos.