Desde muy jovencitos, uno de los aspectos que más valoramos es la libertad e independencia. Todos nos consideramos dueños de nuestra vida. Sin embargo, esto está muy lejos de ser real. No nos damos cuenta de que ni siquiera podemos decidir qué hacer con ella.
Ayer me enteré de que van a investigar la muerte de un pentapléjico que pidió ayuda en Internet para morir. Tenía un blog desde el que iba relatando el suplicio en el que se había convertido su existencia. Sólo leyendo su cabecera, se me encoje el corazón:
Que tenga cuidado quien entre a estas notas con espíritu inocente y aún cargado con el lastre de los buenos sentimientos. No encantaréis ánimos para seguir adelante ni consuelos cálidos en este rincón. Tan solo ofrezco reflexiones descarnadas sin esperanzas con la frialdad de la razón dueña de su destino inexorable hacia la muerte. En cuanto hay esperanza se pierde la posibilidad de pensar racionalmente y enfrentarnos a nuestra muerte, libres y sin miedos.
Sólo pedía una muerte digna pero ni a eso se tiene derecho. No me puedo creer que las personas aún tengan que pedir sopitas para poder terminar con su dolor y que la persona que les ayude pueda ser encarcelada y condenada a más años que un malhechor.
Sin embargo, nuestros políticos están más ocupados en lograr que todos los españoles puedan ver el mundial. Mucho más importante, ¡claro!
Estos políticos no tienen vergüenza. Les parece más importante el futbol que cualquier otra cosa. Pero claro, no se puede esperar más de semejantes individuos.
En mi opinión, el no permitir a una persona poner fin a su vida cuando esta sufriendo, es igual que torturarla. Realmente es una crueldad el obligar a una persona a vivir con sufrimiento cuando el poner fin a su vida seria realmente una liberación de su sufrimiento.
El problema radica en las influencias religiosas de la gente, sobre todo por parte del cristianismo, ya que este nos ha hecho ver durante la cantidad de años que lleva influenciando a la gente de este pais, que la muerte llega cuando te toca, y que tu vida no te pertenece a ti, sino a Dios. Ahi esta la base de todos los tabues existentes con respecto al tema de la eutanasia.
Hay personas que dicen que no serian capaces de dormir por las noches sabiendo que han ayudado a alguien a suicidarse. Pues yo seria incapaz de dormir sabiendo que esa persona vive en un sufrimiento constante.
Miedo me da, como la gente se sublebe, dándose cuenta que lo que ocurre en Marbella, ocurre en tantos y tantos ayuntamientos… como no van a pensar en poner el mundial??
La historia se repite…
Exclavos: trabajo y descanso (que no tuvieran tiempo que pensar, porque si no se escapaban)
Roma: Pan y circo (mismo objetivo, que no pensaran)
Actualidad: Telebasura, vida en directo, fútbol… (armas básicas si se quiere controlar al personal)
Ahora en número de votos, si «x» piden eutanasia, pero son una ínfima parte de la sociedad, que apenas se moja en ese tema, no da votos. Si «x» en grado exponencial bastante curioso, le interesa ver fútbol en abierto, y lo dan gracias a «y» partído político, «y» sale ganando en votos. Se lucha el fútbol, que de lo otro se encarga la iglesia.
Afortunadamente, la amiga Loretahur, nos recuerda de vez en cuando, que la libertad no la da el ver un partido de fútbol, eso, (y aunque me guste verlo) nos priva libertades; de exresión, de pensamiento y de obra, al menos durante casi 2 horas, que podríamos haberlas dedicado, por ej., a escribirle a cualquier político la nefasta política que tenemos en ciertos temas que nos inquietan a todos; vivienda digna, trabajo, y un largo ramillete de incertidumbres y etcéteras.
La cortesía ha sido correspondida. Adios.
Realmente impactante la cabecera. Desde luego, da qué pensar.
La eutanasia no significa otra cosa que «buen morir», ¿por qué quitar ese derecho a una persona que está impedida para disponer por si misma de su propia vida?
Lástima que ciertas decisiones políticas se pospongan indefinidamente por su impacto electoral.
Yo creo que ahí está el kit de la cuestión. El miedo a perder votos hace que nadie se moje ante un tema tan espinoso.
Vivimos en un país en el que se valora más un puñado de votos que un gobierno justo y que se implique con la ciudadanía.
Traducido del politiqués: «no es buen momento para tocarles el badajo a los curas». Entre tanto, nos niegan el derecho más elemental: el de dejar de ser.
Hola,
Mirar esta página http://www.muertedigna.org/. qué va decir un sacerdote. Creo en una muerte digna.
@noelia: gracias por el enlace. No conocía la página. Ahora estoy aún más indignada que antes.
Resulta que Luis de Moya es tetrapléjico y ama la vida. Me parece muy loable pero debería tener un poco más de consideración y tolerancia con las personas que no sienten ya ese amor.
Está claro que por parte de la Iglesia hay un claro mensaje pero hay que recordar que España es un estado aconfesional donde existe la libertad de culto. Me parece lamentable que los políticos sigan aún tan supeditados a las disposiciones de la Iglesia.
Yo pienso que cada uno tiene derecho a hacer lo que quiera con su vida mientras no haga daño con ello a sus similares, por lo tanto me parece bien lo que ha hecho este señor. Y que ahora investiguen a ver quien le ha ayudado… pues no se, no me parece bien.
@frantxu: pues como descubran a la persona que le ayudó (que seguro que para eso si emplean toda su inteligencia…) le puede caer hasta 6 años. Y luego tienes a gente como Julián Muñoz que roba n-mil millones y no pasa ni por la cárcel.
Cada día creo que vivo en un país más justo en el que la justicia funciona estupendamente.
Si ya lo decía Stanislaw Jerzy Lec: «Todos somos iguales ante la ley, pero no ante los encargados de aplicarla»
¿De qué me suena esa cita? 😉
Así es… sin duda no somos dueños de nuestro destino… lo cual es normal y comprensible pues existen muchos factores externos y extra-humanos que no podemos controla (el mejor ejemplo es la metereología) pero tienes toda la razón cuando dices que los políticos están más atentos a que podamos ver el mundial en condiciones y pasan de este tema… Vivimos en un mundo netamente neoliberal en el que la libertad se entiende en qué todo vale para ganar pasta [en este caso el mundial] y además la influencia cristiana (habría que mirar otras religiones también pero esta es la que nos afecta de pleno) tienen un pleno impacto en el tema de las libertades.
P.D.: Lo que cuesta resumir un pensamiento tan complejo en un comentario de un blog. Es un duro ejercicio de síntesis, por ello, perdonad si me confundo o leís otro post que me contradiga en algo [será porque no me he explicado bien].
P.D.2: Jo, me he alargado incluso en el PD. Esto se está volviendo recursivo (palabra que siempre asociaré Charo [profa de programación])
@julen: ¿Tú también has recibido las clases magistrales de Charo? «Solución troglodita» XD
No sabía que eras chico ESIDE 😉
¡Claro que sí! La clase fantasía de ideas felices de Programación y EDA. No sólo he sido chico ESIDE si no que he estado contigo en clase. 😉 [Esto es casi plan paranóico de Lost]
… y a todo esto a mi me encanta el fútbol!!! AUPA los Isótopos.. ¡¡¡DO’H!!! Digo AUPA ATHLETIC! [No puedo resistir mi dualidad Simpsons – Athletic]
@julen: entonces ya sé quién eres!! (encima conociendo tu afición por el Athletic…)
Hoy trata el tema Manuel Alcántara en su artículo de opinión, genial como siempre.
Una mano amiga.
Excelente artículo Jaizki. Me ha encantado el tono y como Manuel Alcántara, yo también brindo por la persona que sostuvo el vaso.
No había muchos Julen en informática (al menos en mi clase)…
Acabo de leer este artículo y creo que la sociedad en general, es decir, todos en el mismo saco, es un «animal absurdo y tonto».
No quiero defender a los políticos pero es muy dificil poder contentar a todo el mundo.
Por un lado se me ocurre que esta persona esté sufriendo un gran malestar por no poder realizar una vida normal y por no poder ejercer, en lo que a mi juicio es un derecho, el sacrificio de su propia vida.
Por otro lado se me ocurre que no somos mejores por denegar la muerte a un condenado a cadena perpetua.
Es cierto que si no matamos dejamos vivir, pero en que condiciones.
Pensar en la posibilidad de que tenga que estar condenado, o bien a una silla de ruedas o bien a pudrirme dentro de cuatro paredes con gente poco deseable, me hace reflexionar sobre que es lo que quiere esta sociedad de libertades moderna.
Es fácil culpar a grupos como la iglesia, que no me gustan, o los políticos que tampoco me gustan, pero la realidad es que formamos parte de una sociedad falsa y sin valores, que confude muy frecuentemente los valores de libertad y que se deja engañar con un caramelito o un mundial de futbol.
Si lo piensa uno detenidamente, todos esos artistas, cantantes sobre todo, que hacen conciertos en «beneficio de» no son más que patéticas alabanzas al ego de la sociedad.
Si realmente quieres ayudar y estás convencid@ de que tienes que hacer algo, ni lo digas, simplemente hazlo.